martes, 22 de mayo de 2012

viernes, 4 de mayo de 2012

Bajense de la nube, por favor.

Hace ya  un  año  que se celebraron las elecciones municipales con el  triunfo del PP, y desde entonces tengo la extraña sensación de que toda la vida municipal estuviera en sordina. El griterío permanente de los últimos años de  repente  cesó, lo cual es prueba irrefutable de que la vociferación viene casi siempre de la derecha, cuando no está en el poder. La mayoría absolutísima del PP  en las autonomías y  en  la  nación ha dado lugar a una especie de fatalismo entre la población, y de parálisis en consecuencia. Harán lo que quieran, nadie les podrá coartar ni discutir ni poner condiciones a cambio de apoyo, porque esta vez no precisan de ningún apoyo, se bastan y se sobran con sus escaños, no han de tener en cuenta a nadie,  tanto  en  las  comunidades  como  en  la  nación,  pero  no  es  así  en  este  ayuntamiento y parece  que  eso  se  les  olvida  por  momentos. 

Cuando llega el momento de tomar decisiones relevantes para nuestro municipio es  ahí  cuando  se  empiezan  a dar  cuenta, y  despiertan  de  su  gran  sueño y  empiezan  a  bajar de  su  nube, esto demuestra irrefutablemente la  falta  de  ética  en  su  comportamiento  político  primando  siempre  sacar  sus  propuestas a  toda  costa. Y encima cuando no se les da la razón tachan a los demás partidos políticos de irresponsables, y ahora mi  pregunta  es ¿Quiénes  son  más  irresponsables?, “ los  que  no  escuchan y  se  creen  que  tienen  toda  la  razón sin  realizar  un  debate  previo”, y aquellos que hacen suya la frase “Como  yo  digo  o  si no, nada”.

Igualmente sucede a nuestros vecinos, nadie rechista, porque  todavía no han despertado, ni bajado de la  nube, están anestesiados  por  un   cambio político nunca  acontecido  en  el  municipio, del  mandato  de  partidos  de  izquierdas durante más  de  30  años  al gobierno  de  derechas. Parece que estamos esperando algo, pero no sabemos el qué. Se ha castigado a la izquierda dando el voto a la derecha, pero ahora llega el momento de preguntarse ¿qué  es  izquierdas? ¿qué  es  derechas? y  ¿quienes  actúan  como  tal?

Pero  cuando  el  ciudadano  empiece a despertar de  su  sueño y  empiece a  bajar  de  la  nube  se encontrarán con una gran subida de impuestos, a pesar de haber elegidos a áquellos que prometían que nunca lo harían, se encontrarán con un nuevo impuesto (tasa de basura), se encontrarán que han vendido su agua a desconocidos, se encontrarán pagando más por sus medicinas, se encontrarán que a duras penas pueden pagar la universidad a sus hijos…. Despertarán sudando de ese sueño.

Nosotros  ya  hemos  empezado  a  despertar según  los   acontecimientos  se  van  sucediendo: la  aprobación  de  unos presupuestos  sin  consenso, la  aprobación de  la  gestión del  agua del  municipio de  su  red  sanitaria y  su  alcantarillado  hipotecándonos  durante  50 años a una empresa privada (y  de  la  forma  surrealista de  cómo  se  consiguió  el  apoyo  para  dicha  aprobación),  al  igual  que  su  explicación: ”No  podemos  dejar  de  percibir una cierta  cantidad  económica”.  Esa  cantidad  económica  siempre  se  percibirá a  no  ser  que  dicha  tasa  se  quite,  puesto  que  es  una  tasa  de  alcantarillado  que  pagan  los  vecinos. Vamos, que  nadie  regala nada, por  favor:  reconozcan  el  esfuerzo  del  ciudadano  que  es  quién  la  paga y  no  nos  hagan  comulgar  con  ruedas  de  molino  haciéndonos  creer  que  este  dinero nos  lo  regala  el  CYII .

Así de engañosas son las explicaciones que llegan al ciudadano, y digo esto por lo que  quieren hacer ver con respecto a los motivos de la crisis que estamos padeciendo, nos dicen que está basada fundamentalmente en la burbuja del ladrillo pero ¿qué  pasa  con  la  gestión pública? ¿no  hay  responsables? ¿y con  la  crisis política?.
Pero claro, es bastante más fácil corregir  los  errores pasados castigando a una sociedad asfixiada por la crisis mermando los  servicios  básicos, a golpear los cimientos de unas instituciones plagadas de redundancias.

Somos  nuevos en  esta aventura  voluntaria,  pero eso no quita que, conscientes de nuestras limitaciones, luchemos por nuestras  convicciones, independientemente  de  lo que  nos  tachen  los unos  y los otros